En 2005, mientras Ken Livingstone era alcalde de Londres, convocó a los representantes de 18 megaciudades para definir qué medidas podrían adoptar para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y los riesgos climáticos.
Al año siguiente, se unió la Fundación Iniciativa Climática Clinton (CCI) que hizo que las ciudades participantes aumentaran a 40, dando origen a la red conocida como C40 o Grupo de Liderazgo de Ciudades contra el Cambio Climático que fijó a las siguientes ciudades en su Comité Directivo: Berlín, Hong Kong, Johannesburgo, Los Ángeles, Londres, Nueva York, São Paulo, Seúl, Tokio y Yakarta.
Hace unas semanas, los miembros de este grupo se reunieron en Buenos Aires en donde anunciaron una Declaración de Ciudades Latinoamericanas sobre el Pacto de Alcaldes, que cuenta con el apoyo de Santiago, y una Declaración de Intenciones de una Ciudad de Autobuses Limpios, que es apoyada por Valparaíso.
A continuación te contamos en qué consiste cada declaración.
Declaración de Ciudades Latinoamericanas sobre el Pacto de Alcaldes
“Más de 700 de las ciudades más grandes del mundo podrían reducir las emisiones de gas de efecto invernadero en hasta 1,5 millones de toneladas cada año, mediante la construcción de mejores sistemas de transporte y evitar la expansión urbana”.
Esto fue lo que dijo Felipe Calderón, ex presidente de México y Presidente de la Comisión Mundial sobre la Economía y Clima, sobre la declaración que Bogotá, Buenos Aires, Caracas, Curitiba, Lima, México D.F., Quito, Rio de Janeiro y São Paulo firmaron a fines de marzo en apoyo al Pacto de Alcaldes.
Esta iniciativa consiste en que cada ciudad participante realice un reporte público sobre sus emisiones contaminantes para que actúen como una autoevaluación que permitirá conocer qué tan preparada está la ciudad ante los efectos del cambio climático. Asimismo, este informe considera especificar cuáles son las amenazas y vulnerabilidades a las que se enfrenta cada ciudad para dar paso a un plan de acción que, por un lado, permita enfrentarlas y que, por otro, asegure la reducción de las emisiones contaminantes.
Si bien Santiago y Valparaíso no pertenecen oficialmente al C40, le entregaron su apoyo esta medida junto con las siguientes ciudades: Asunción, Belo Horizonte, Cali, Córdoba, Fortaleza, La Paz, Ciudad de Panamá, Santo Domingo y Tegucigalpa.
Declaración de Intenciones de una Ciudad de Autobuses Limpios
Manteniendo la línea de la declaración anterior, ésta busca implementar buses de bajo y cero emisiones e invitar a los fabricantes de vehículos a “descarbonizar el transporte público urbano” con el fin de mejorar la calidad del aire y de vida en las ciudades.
En el encuentro, las ciudades latinoamericanas que se adhirieron a la declaración son: Bogotá, Buenos Aires, Caracas, Curitiba, Quito, México D.F., Río de Janeiro y Salvador.
Según una investigación de C40, en 2020, estas ciudades representarán una flota de 114.655 buses alrededor el mundo que si se cambiaran por buses de cero emisiones cero, éstas se podrían reducir hasta en 1.78 millones de toneladas anuales.
Las ciudades que apoyaron esta declaración, pero que no son miembros del grupo son: Asunción, Belo Horizonte, Córdoba, Fortaleza, La Paz, Santo Domingo, Tegucigalpa y Valparaíso.