Una ordenanza impide nuevos desarrollos en más de 6.000 hectáreas de humedales del río Luján. Es tras reclamos de vecinos y ambientalistas.
Parecía un negocio sin fronteras. Pero en Escobar, le pusieron límites a la extensión de los complejos inmobiliarios. El Concejo Deliberante aprobó una ordenanza que prohíbe construir barrios privados o countries sobre los humedales de la cuenca del río Luján. Son casi 6.000 hectáreas situadas en ese distrito de la zona norte del Conurbano que ya no podrá habilitar nuevos emprendimientos. Y la normativa extiende la restricción a otras 2.000 hectáreas.
Reclamado por organizaciones ambientalistas y vecinos afectados por recientes inundaciones derivadas de desbordes del Luján, la limitación representa un freno a un filón comercial en expansión. En Escobar hay 7 barrios cerrados: El Cantón, Naudir, El Cazal, Puerto del Lago, San Matías, San Benito y complejo Villanueva. Y en la municipalidad están las carpetas presentadas para la apertura de varios complejos. “Las arcas de la comuna dejarán de percibir unos 300 millones de pesos por tasas y canones”, reconocen las autoridades.
Sin embargo, el intendente de Escobar, Ariel Sujarchuk (PJ), fundamentó la iniciativa con otros argumentos: “Pensamos antes que nada en la protección medio ambiental de casi una cuarta parte del territorio de Escobar. El progreso debe venir de manera razonable y haciendo eje en la conservación de nuestros recursos naturales”, dijo el alcalde. Es que desde la última reforma al código urbano, en 2009, en el distrito había “una verdadera anomia en temas de radicación inmobiliaria. No se cumplían las ordenanzas y tampoco las leyes provinciales. Ordenamos esa cuestión y ahora buscamos una planificación amigable con el ambiente”, agregó Sujarchuk.
Después de las últimas inundaciones de 2014 y 2015, las entidades ambientalistas y organizaciones vecinales habían reclamado a los municipios de Escobar y Tigre por el “crecimiento desmedido y sin control” de las urbanizaciones privadas en terrenos bajos y húmedos de la cuenca del Luján.
Según coinciden los especialistas, estos ecosistemas que rodean al río acumulan agua en los períodos de lluvia y evitan las inundaciones en las zonas altas. A partir de la década del 90, comenzó en la región el relleno de los humedales para realizar emprendimientos. A la par, comenzaron a anegarse barrios que históricamente no se inundaban.
En abril de este año, la municipalidad de Escobar suspendió los permisos de construcción en cinco urbanizaciones, hasta que los desarrolladores realizaran las obras públicas necesarias para adaptarse a los lineamientos requeridos por la nueva gestión. Ahora, la ordenanza aprobada por el Concejo prevé reformular esos permisos para evitar eventuales demandas judiciales, según explicaron en la comuna.