Muniboletin
09/05/14
El Cronista
Cómo hacer para que las ciudades vuelvan a ser un buen lugar para vivir

El desafío cobra peso ante el continuo proceso de urbanización y la irrupción de las megaciudades. Sobre ese y otros temas debatieron dirigentes políticos de toda Amércia Latina en un foro de líderes realizado en México.

 

Organizar la burocracia para que pueda responder al desafío de las megaciudades. Y hacerlo incorporando la red, sin copiar recetas sino desde el contexto latinoamericano, desde las particularidades de cada país, de cada ciudad.

Con ese foco, entre otros, y buscando sobre todo aprovechar las experiencias de distintos modelos de ciudades digitales, dirigentes de buena parte del continente se reunieron durante dos días en el XVII Foro de Líderes de Gobierno de América Latina y el Caribe, organizado por Microsoft en el hotel Saint Regis de la ciudad de México.

Si bien parte del leit motiv del encuentro era “poner la tecnología al servicio de las personas”, no se habló solo de tecnología. Según Hernán Rincón, presidente de la compañía para América Latina, los objetivos del encuentro -el primero lo inauguró Bill Gates hace 17 años- van más allá: “La idea es estimular la discusión sobre los desafíos que enfrentan los gobiernos”. Y buscar respuestas desde alianzas público-privadas.

Un tema que se repitió casi como una letanía fue el hecho de que el 80% de la población ya es urbana y el ritmo de crecimiento de las ciudades sigue superando al de crecimiento de la población. Para 2030, se espera que haya entre 25 y 30 megaciudades de más de 25 millones de habitantes. De allí que se planteara como central cómo mejorar la organización de los centros urbanos, aún con la advertencia de Rincón de que “no hay un modelo de ciudad digital porque no hay dos ciudades iguales en el mundo” ni tienen las mismas problemáticas.

Entre los que intentaron predicar con sus ejemplos -en exposiciones que claramente buscaron también promocionar sus ciudades y provincias- estuvieron el alcalde de la colombiana Manizales, Jorge Rojas, el ex alcalde de Barcelon Jordi Hereu; el ministro de Modernización de Buenos Aires, Andrés Ibarra, y el gobernador de San Luis, Claudio Poggi.

Poggi relató el proceso de digitalización de San Luis, sus orígenes hace 16 años con asesoría canadiense y sus logros: una penetración de Internet de más del 90% en la provincia y el 100% de los chicos de primaria con computadoras portátiles.

Ibarra sostuvo que “en el plan de modernización”, la Ciudad tiene “una mirada integral de lo que debe ser una ciudad moderna o smart city”. “No podemos abarcar las distintas áreas de gobierno sin que los proyectos de modernización y sustentibilidad sean trabajados en forma horizontal”, agregó, antes de citar la agenda de gobierno abierto, sustenatibilidad, contenerización y la creación de laboratorarios de innovación y distritos específicos.

El alcalde de Manizales fue uno de los oradores que se destacaron. Comentó que su ciudad tiene poco menos de 500.000 habitantes y que su industria “no daba para más”. Así describió cómo decidieron “crear un Ecosistema TIC”, comenzando por la instalación de call-centers pero siguiendo luego con planes para elevar el nivel profesional de los trabajadores con el objetivo de mejorar la calidad de esos puestos de trabajo.

Con proyectos propios y del gobierno de Colombia, también impulsaron la creación de empresas de software y pusieron el foco en la capacitación más que en la compra y distribución de computadoras. Según su descripción, el desempleo se redujo a la mitad. Y su apuesta fue celebrada por sus colegas del resto del continente fue lograr que el distrito tecnológico que crearon, CityTech, sea conocido como “el Sillicon mountain, por la altura y el entorno que tiene Manizales”.

Hereu, por su parte, habló de como encararon “las opciones de Barcelona” a partir de “entender la ciudad como un proyecto colectivo de múltiples dimensiones”, una realidad desde la que hay que partir, vinculada a qué es la ciudad y cómo se fue constituyendo, para encarar un proyecto cuyo objetivo es “que aumente la calidad de vida de nuestros ciudadanos”.

El catalán destacó la importancia de la solvencia de la ciudad, para que pueda tomar sus decisiones. Aunque resaltó que la tecnología resultó imprescindible para modernizar el ayuntamiento y cambiar la relación con el ciudadano, también dijo que son “un acompañante discreto”. Y concluyó: “Las ciudades del futuro son las que apuestan por el talento”.

El encuentro, en el que también expusieron otros gobernantes y funcionarios de la región, también tuvo como ejes los desafíos que enfrentan el sistema educativo, la relación con los jóvenes y la necesidad de impulsar los nuevos emprendimientos, principales creadores de puestos de trabajo.