Muniboletin
22/03/24
Clarín
Día Mundial del Agua: por qué es clave cuidar este recurso

El agua es un elemento crítico para la supervivencia de todos los organismos vivos en la Tierra

El agua es un elemento crítico para la supervivencia de todos los organismos vivos en la Tierra. La porción dulce es vital y limitada para todos los organismos terrestres, siendo solo el 2,5 a 2,75 % del total, de la cual el 1,75-2 %, el 70 % del total está congelada en glaciares, hielo y nieve, un 0,7-0,8 % (28% del total) son aguas subterráneas dulces y menos de 0,01 % del total es el agua superficial (0,4%) que encontramos en lagos, pantanos y ríos. La atmósfera solo contiene 0,04 % del agua, un 1,6% del total. Los incrementos poblacionales han hecho que de 1962 a 2014, la disponibilidad de agua per cápita anual pasó de 13.200 m3 a 6.070 m3 por habitante.

 

En el mundo, según la Comisión Internacional de Riego y Drenaje (International Commission of Irrigation and Drainage, www.icid.org), se riegan 341 millones de has que representan el 20 % de la superficie agrícola global y proveen cerca del 50 % de los frutos de la agricultura. La superficie bajo riego en el mundo pasó de 158 millones de has en 1970, a 258 millones de has en 1990 a estos 341 actuales. En este periodo nuestro país, mientras en el mundo se más que duplicaba, se mantuvo estable en torno de 1,5 millones de hectáreas bajo riego según el Censo Nacional Agropecuario 2018.

 

La agricultura emplea el 70 % del agua dulce del mundo. La bioeconomía, es una respuesta al cambio climático y es un modelo de desarrollo siendo el agua un insumo básico de la Vaca Viva, sea como insumo para la fotosíntesis o agua de bebida para los animales.

 

Cómo explica Alejandro Pannunzio nuestro país tiene una gran riqueza en recursos hídricos superficiales de 26 millones de litros por segundo de agua superficial. La distribución es heterogénea ya que dos tercios del territorio es árido/semiárido, aunque en los valles patagónicos y Cuyo se dispone de agua de alta calidad. En zonas húmedas solo el Rio de la Plata tiene un caudal de 20 millones de litros por segundo, equivalente a aproximadamente 250 litros de agua por habitante del planeta por día que se salinizan sin ningún uso. Solo un tercio de nuestro territorio es húmedo y es donde se asienta la mayor parte de la producción extensiva de granos y carnes, son zonas pasibles de riego complementario. Las zonas más secas sufrirán más intensamente los efectos del cambio climático global y deberán mejorar su eficiencia de riego.

 

El acceso al agua potable es un derecho fundamental para la vida no cubierto para un tercio de la población global y avergüenza que cada día mueran 1000 niños por enfermedades derivadas de la mala calidad del agua. En Argentina la distribución de agua potable por cañerías comienza en Buenos Aires tras la epidemia de colera iniciada en La Boca en 1867. En 1871 se produce la epidemia de fiebre amarilla con una mortandad del 11 % de la población porteña. Agua distribuida y cloacas fue la respuesta que aún esperan muchos argentinos. La antigua casa de bombas de Recoleta cumplió su rol en el abastecimiento de aguas hasta que en 1933 una vez remodelado por el Arq. Bustillo pasó a ser la actual sede del Museo Nacional de Bellas Artes.

 

Se usa poco el riego en Argentina, de un potencial estimado en 6 millones de has, según el censo agropecuario 2018 hay 36.296 unidades bajo riego con una superficie de 1,39 millones de has y una media de 38 has por predio. Para crecer los productores dicen que es imprescindible el apoyo financiero, de haber una estrategia en este sentido es importante tomar como base la ley de promoción de riego de Chile, que permitió tecnificar los sistemas, aumentar la productividad, estabilizar los rendimientos y sobre todo distribuir más equitativamente el agua. En este punto es importante destacar la puesta en vigencia del decreto del Gob. Bordet de Entre Ríos que disminuyó al 50 % los cargos fijos de energía eléctrica en las producciones regionales con consumo estacional, lo que permite la mayor tecnificación de las mismas, sin penalizarlas en los periodos en los que no consumen energía eléctrica.

 

La disponibilidad de agua en Argentina: es de 814 km3/año. Se extraen aproximadamente 32,48 km3/año para todos los usos del agua, que es el 3.99 % de la disponibilidad hídrica. El 66.7 % de la extracción total está destinado al uso de regadío, es decir, unos 21,66 km3/año. El 75% agua superficial y 25% agua subterránea.

 

Según FAO AQUASTAT (2013), la eficiencia de la infraestructura de riego en nuestro país es del 40 %, es decir, que el 60%, se evapora o infiltra de los canales de riego El Libro “Tópicos actuales en ciencias agrícolas” publicado esta semana en India y Reino Unido, incluye un capítulo sobre riego del Dr. Pannunzio de FAUBA, en el que se abordan criterios de diseño y de programación de riego para mejorar la eficiencia del uso del agua de riego, ya que también debe mejorarse la eficiencia de los sistemas de riego actuales. https://www.bookpi.org/bookstore/product/current-topics-in-agricultural-sciences-vol-6/

 

El 22 de marzo es el día mundial del agua y este año el tema es el del agua subterránea. ¡El agua que no vemos! Visibilicémosla, protejamos todas las fuentes de agua, evitemos su contaminación, usémosla eficientemente sin malgastar.

 

Un ejemplo es el Acuífero Guaraní, un gigantesco reservorio natural de agua dulce que se extiende por debajo de la superficie de parte de Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay. Se trata de una de las mayores reservas de agua dulce conocidas del planeta Tierra. Por su volumen, es el tercero en importancia a nivel mundial. Cubre 1 190 000 km², un 19% en Argentina, con un volumen de aproximadamente 55.000 km³, un espesor de entre 50 y 800 m y una profundidad máxima de aproximadamente 1800 m. Se estima su potencial uso en unos 40/50 km³ anuales.

 

Para tener una magnitud de lo que esto representa el volumen total es la superficie de CABA y una profundidad de 272 km, (272.000 metros) o el total de la provincia de Buenos Aires y una profundidad de 179 metros. Gigantesco. Por ello Alejandro Pannunzio dice que el Acuífero Guaraní es a los recursos hídricos lo que Vaca Muerta es al gas argentino.

 

El valor del agua es mucho más que su precio: el agua tiene un valor enorme y complejo para nuestros hogares, la cultura, la salud, la educación, la economía y la integridad de nuestro entorno natural. Esta necesidad y escasez nos señala la importancia de cuidarla y su manejo nos involucra a todos los actores sentados en la misma mesa.

 

Argentina puede incrementar su superficie bajo riego en 6 millones de has, si las mismas recibieran 200 mm de riego complementario, lo que se satisfaría con menos del 5 % de los recursos hídricos disponibles, tendríamos un ingreso anual marginal aproximado de 12 millones de toneladas de granos que, a 300 dólares de precio promedio por ton, significaría un ingreso adicional anual por exportaciones de 4.200 millones de dólares.

 

Como hemos dicho es mucho lo que podemos hacer desde nuestra casa, comunidad o cualquier área donde nos desenvolvamos. Empecemos por educar a nuestros niños, para que sean los guardianes y protectores del agua, de la cual se beneficiarán en el futuro, si aprenden a cuidarla y racionarla de la forma correcta.

 

 Por Fernando Vilella