La aglomeración de habitantes en grandes capitales demandará espacios cada vez más sustentables apoyados en la innovación.

 

En tan sólo diez años, el 92% de la población de Latinoamérica vivirá en las ciudades de Buenos Aires, Córdoba, Rosario, San Pablo, Santiago de Chile, Montevideo, Río de Janeiro, Bogotá, Lima o el DF. Esta realidad cada vez más cercana motivó a un grupo de expertos a analizar el desarrollo de dichas capitales.

 

En este marco, Orlando Ayala, vicepresidente mundial de Microsoft, explicó a PERFIL que “las micropymes y los emprendedores son los ejes principales para estas ciudades”. Y que, por el volumen de habitantes que albergarán, se hará imprescindible gestionar un hábitat que las transforme en espacios cada vez más inteligentes y competitivos. Es decir, en ciudades que desarrollen servicios y soluciones efectivos que faciliten la vida a los ciudadanos, que tengan la capacidad de acoger un tejido empresarial capaz de generar empleo para millones de personas, y que incorporen el uso de las TIC en su planificación”.

 

“Buenos Aires ya está desarrollando proyectos en esta línea, el gobierno ‘macrista’ ha desarrollado un plan estratégico para pymes y para la juventud”, agregó Ayala. “Y la tecnología es un factor decisivo para acelerar la competitividad en las ciudades”, comentó a PERFIL.

 

Las declaraciones del número dos de Microsoft, fueron hechas a PERFIL durante la presentación del estudio “La hora de la competitividad”, elaborado por el Foro Iberoamericano Siglo XXI y auspiciado por Microsoft Corporation en Madrid, y señala a las ciudades inteligentes, las micropymes y el apoyo a emprendedores como las claves para ser competitivo en Iberoamérica. “Las ciudades deben crear valor de marca”, remarcó el experto. “Barcelona ha logrado desarrollar su marca propia: el Barça; Montevideo exporta ya el 5% de su PBI en software, y Bogotá, que es el diamante del Caribe, está desarrollando cinco regiones mediante la integración del mundo urbano con el digital”, ejemplificó.

 

 “La cuestión es saber si la colaboración de las administraciones locales y los gobiernos locales y regionales pueden hacer algo para mejorar la capacidad competitiva de los ciudadanos, de los profesionales y de su municipio o región”, enfatizó. Ayala añadió que está demostrado que “al lograr que más micropymes incorporen TICs, se logra un mayor crecimiento en los negocios, un incremento en la creación de puestos de trabajo y algo muy importante: el fortalecimiento de la clase media en los países”.

 

Lo que viene. “El futuro será de aquellas empresas y profesionales que puedan desarrollarse socialmente y que se cualifiquen en el uso de tecnologías; podrán exportar y vender en todo el mundo sus productos y servicios, y para esto, el desarrollo de una educación técnica y superior que responda a la demanda de los mercados es elemental”, aseguró Ayala.

 

A la vez, opinó que espacios de diálogo como Mercosur, Unasur y Alianza del Pacífico son idóneos para establecer una relación de cooperación y crecimiento en el marco de la competitividad. Tan sólo queda una década para que nuestros ojos puedan percibir la aglomeración de gente en las urbes; el reto está claro: crear y gestionar un espacio habitable, digno y sostenible para todos y cada uno de los ciudadanos.