Sobre Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y Ciudades

Esta conferencia web organizada por el Instituto para el Desarrollo del Territorio (IDT) y la Cátedra Libre Municipios Sustentables de la UNLP tuvo como expositor a Carlos Amanquez, secretario General de la Red Internacional de Promotores de los ODS.

Orlando Costa hizo la apertura expresando que “la Agenda 2030 de la ONU para el Desarrollo Sostenible, con sus 17 Objetivos y 169 Metas de Acción, es una propuesta superadora de los Objetivos del Milenio adoptados hasta 2015. Integra las dimensiones económica, ambiental y social que deben estar en equilibrio para el desarrollo sostenible, y apunta a un cambio del modelo vigente proponiendo prosperidad, erradicando la pobreza y la desigualdad, cuidando el planeta, el medio ambiente, los recursos naturales y accionando contra el cambio climático, entre otras cuestiones importantes para nuestra vida y la del planeta”.

Carlos Amanquez comenzó su presentación con datos de la realidad mundial respecto a la cantidad de pobres y su aumento en América Latina en los últimos años; el desempleo en los jóvenes; el acceso a la salud; la amenaza del cambio climático; los desafíos de una educación de calidad, equitativa, accesible y universal; la desigualdad de género y la falta de oportunidades para los más vulnerables; el acceso a Internet y a las tecnologías, el uso inadecuado de recursos naturales, la debilidad de la democracia; entre otros problemas de una realidad mundial compleja.

“El desarrollo sostenible es el que satisface las necesidades de la generación presente sin comprometer la capacidad de las generaciones futuras para satisfacer las propias”, expresó agrupando los ODS por temas según se trate de las personas, el planeta, la prosperidad, la paz y las asociaciones para lograrlos.

“La Agenda 2030 tiene principios de universalidad, integralidad, con la intención de ‘no dejar a nadie atrás’ que constituyen desafíos para todos y en todos lados”, dijo, explicando a continuación que además de las Metas hay mecanismos de implementación y de seguimiento y revisión para su cumplimiento”.

El enfoque de los derechos humanos y la pobreza llevó buena parte de la disertación por la relevancia que tiene este problema multidimensional “que no es sólo la falta de bienes materiales, sino que tiene que ver con tres dimensiones fundamentales: la salud, la educación y la calidad de vida con acceso a servicios esenciales para la vida”.

Más adelante Amanquez manifestó que “los ODS están acompañados de indicadores para monitorear y evaluar el aporte y cumplimiento de sus metas, para medir, y poder comparar los progresos hechos para cada uno”, agregando que “hay que llevar adelante acciones en los tres niveles: mundial, local y por parte de la personas, con las ciudades cumpliendo un rol fundamental protagonizado por sus instituciones y organizaciones, con verdadera participación de todos los actores de la vida local para la transformación social”